El desarrollo de la conciencia es un proceso de construcción y de-construcción de la identidad permanentes 

Qué es el desarrollo de la conciencia? 

La conciencia es un término muy usado en nuestros días y hay diversas teorías que intentan explicar de qué se trata. Podemos definirlo como el conocimiento que se tiene sobre sí mismo. Para lograr esto, existen gran cantidad de herramientas que te pueden llevar a construir una percepción propia de tu ser y así determinar cual es el desarrollo que le quieres dar a esta entidad tan compleja. Sin embargo, pueden haber aspectos que te lleven a la confusión, porque al identificarnos con ciertas características podemos caer en una cantidad de definiciones que nos limitan el potencial creador que está en nosotros mismos. 

Siempre intentamos definirnos

La identidad nos limita. A lo largo de los años, los seres humanos nos inventamos un guión de que somos tal u otra cosa para encajar en un grupo social, y sin darnos cuenta todo eso que intentamos “ser” está limitando nuestro potencial. 

Este guión nos dictamina quiénes nos consideramos nosotros mismos, nuestras acciones, pensamientos, emociones, sensaciones, lo que nos gusta, lo que no, lo que supuestamente está bien. Y lo único que en realidad nos hace es llenarnos de prejuicios, cerrarnos la mente, engañándonos con la idea de que lo que pensamos y vivimos es lo único verdadero. Cuando existe un mundo lleno de posibilidades para ser, para existir. Además te quita la posibilidad de reinventarte cada día.

Por ejemplo, hay quienes se identifican con un género musical y desarrollan todo un tipo de vestimenta, ornamentos y estilo que va de acuerdo con dicho género. Esto los lleva a discriminar otros géneros que son socialmente opuestos como lo son el rock y el reguetón. Como están afiliados a cierto estilo de música y socialmente se ve mal visto que a un rockero no le guste el reguetón o al contrario, entonces simplemente lo rechaza. Con esta idea están negando que puedan tener afinidad por alguna de las canciones ya sea porque es pegajosa o porque simplemente el ritmo es agradable. 

Y así rechazamos todo lo desconocido sin ni siquiera haber experimentado o pensado cómo puede ser el “otro” que ves tan diferente a ti. Esto aplica para religiones, color de piel, ideologías, gustos, aflicciones, etc. 

 Y en realidad es ridículo porque te estas perdiendo la oportunidad de enriquecer tu interior al aprender de los demás y todos los estilos de vida y puntos de vista que existen en este mundo tan diverso y rico en cultura. 

Ahora antes de rechazar al otro porque usa zapatos verdes, porqué no intentas probártelos a ver que tal te quedan?

La identidad te impide la posibilidad del cambio 

La identidad se construye a lo largo de la vida. Pero para madurar este estado es necesario re-aprender desde tu propia experiencia qué significa esto en relación a lo que tú quieres ser. Es decir, es necesario que hagas un ejercicio de reflexión para identificar cuales son las cosas que son propias de tu vida y cuales fueron impuestas. 

Nadie te define. Solo tú puedes hacer de ti la persona que quieres ser. Ese ser humano comprensivo, compasivo y sensible con el mundo que te rodea. Líder y ejemplo de vida consciente de todas las decisiones que toma, intuitivo y atrayente de las cosas mágicas de la vida, abundancia y felicidad. 

No tienes por qué ser eso que te dicen que eres o que tú entorno te obliga a ser. Suelta el guion y sé tú mismo. 

Perdónate. No tienes que ser esa persona herida que tuvo que hacerse el fuerte. No tienes que ser esa persona dura porque rechazaron tus sentimientos. No tienes que ser esa persona indiferente porque alguien no te correspondió. Todas fueron circunstancias pasadas. Es seguro ser afectivo, empático y amoroso. Porque son aspectos que hacen parte de ese ser que se construye día a dia y que poco a poco va logrando sus metas. 

Siendo así, el desarrollo de la consciencia está relacionado con un profundo camino hacia el interior, donde encuentras tus propias verdades, donde residen las posibilidades de crear todo lo que quieres experimentar en la vida. Sin ataduras, sin prejuicios, construyendo tus valores con lo que aprendes y practicas en tu cotidianidad. 

La personalidad se compone de lo que piensas, lo que sientes y lo que haces

Busca coherencia y autenticidad en vez de gastar tu energía imitando a otros. Procura no identificarte tanto con aspectos externos y busca dentro de ti lo que te apasiona, lo que te da paz, lo que te hace sentir completo. Hay que ir más allá de lo que ves a diario en las noticias, en tu entorno y practicar la instrospección para evaluar permanentemente quién eres desde tu esencia y verás los cambios en la vida. 

Además, al descubrir quién eres dejarás de competir y compararte con los demás. Entenderás que cada uno vive su propia experiencia y te volverás más empático.

Comprenderás esa unidad y amor que nos hace humanos y que deberíamos compartir como Humanidad.